El perro es una especie gregaria y no está en su naturaleza quedarse solo. En libertad los perros viven en grupos familiares que no se separan. Cuando descansan, duermen pegados unos a otros y de día se trasladan juntos explorando el entorno. Sin embargo, vivir con los humanos, la mayoría de las ocasiones, conlleva a que tienen que aprender a quedarse solos, como mínimo en espacios cortos de tiempo. De lo contrario, puede que el animal desarrolle un trastorno relacionado con la separación pudiendo tener cuadros de ansiedad, miedo y estrés.
Los tutores intentamos que estos periodos, en los que se quedan solos, sean más llevables dejándoles diferentes tipos de masticables. Un reciente estudio parece verificar nuestra intuición, como mínimo durante cortos espacios de tiempo.
¿Qué distracción es la que más gusta al perro?
En este estudio explora la efectividad de diferentes tipos de enriquecimiento para mejorar el estado emocional negativo consecuencia del aislamiento social. Para ello utilizan 20 perros adultos, carentes de problemas médicos y conductuales, que pudiesen poner en riesgo su salud en la utilización del enriquecimiento. Los resultados de este estudio indican que los masticables de larga duración proporcionan más tiempo de distracción y calma comparado con otro tipo de objetos como juguetes dispensadores de comida, en separaciones cortas de tiempo.
Para concluir, este estudio nos confirma que el enriquecimiento hace algo más llevable nuestra ausencia. Sin embargo, siempre hay que considerar qué tipo de masticable es el adecuado para nuestro peludo y verificarlo antes de utilizarlo cuando se quede solo.
Referencias
Flint, H., Atkinson, M., Lush, J., Hunt, A. & King, T. (2023). Long-lasting Chews Elicit Positive Emotional States in Dogs during Short Periods of Social Isolation. MDPI.